'Euronews' ha hablado con Jenny Okpechi, influencer financiera, sobre cómo construyó su cartera de seis cifras antes de los 30 años y las ventajas de invertir pronto en la vida.
Una de las formas más eficaces de lograr un estilo de vida confortable es desarrollar múltiples fuentes de ingresos. Un estudio reciente de Sage revela que el 32% de los jóvenes de 24 a 44 años tiene un segundo empleo, junto con el 28% de los de 45 a 54 años. Por su parte, el 68% de los jóvenes de entre 16 y 34 años afirma tener varias fuentes de ingresos además de su empleo principal.
'Euronews' ha hablado con Jenny Okpechi (@savvymoneygirl), influencer financiera, sobre cómo ha creado una cartera de inversiones de seis cifras y por qué cree que es crucial que los jóvenes empiecen a invertir pronto.
Cómo crear una cartera de inversión de seis cifras
Aunque una cartera de varios miles de millones pueda parecer impresionante, Okpechi subraya que su éxito no se produjo de la noche a la mañana. Subrayó la importancia de empezar poco a poco y ser constante, incluso frente a las presiones económicas y las barreras culturales.
Criada en un hogar africano tradicional, vio de primera mano cómo los asuntos financieros se consideraban a menudo dominio de los hombres, y las normas culturales limitaban con frecuencia la capacitación financiera de las mujeres.
"Empecé muy joven, a los 16 años, siendo muy intencional con mi dinero. En aquella época, los tipos de interés eran bastante decentes, y se podía conseguir una inversión en letras del Tesoro con una rentabilidad anual del 20%. Empecé a aprender a llevar un negocio y a gestionar las finanzas como mujer, sólo para demostrar que podía hacer lo mismo que un hombre, y los conocimientos que adquirí al hacerlo cambiaron mi vida", explica Okpechi.
Su método consistía en elaborar presupuestos meticulosos, vivir dentro de sus posibilidades y ahorrar dinero con regularidad. "Con el tiempo, pasé de ahorrar a invertir en letras del Tesoro, pagarés de empresa, bonos corporativos y acciones", señala. Muchos jóvenes se resisten a invertir porque creen que necesitan alcanzar un determinado nivel de ingresos antes de empezar con una cantidad mayor.
"Yo no esperé a ganar mucho. Empecé a invertir como estudiante con lo que tenía y eso me hizo buscar otras formas de obtener ingresos extra, como encuestas remuneradas y clases particulares en línea. Incluso intenté escribir un blog, pero tuve que dejarlo por mis estudios", dice y añade: "Con el tiempo, gracias al interés compuesto y a la inversión constante, fue creciendo. Traté la creación de riqueza como una relación a largo plazo: compromiso, paciencia y revisiones".
Tener varias fuentes de ingresos es la clave
La influencer financiera tiene actualmente ocho fuentes de ingresos. Entre ellas, su trabajo a tiempo completo como 'scrum master' (profesional que lidera y facilita el trabajo de un equipo Agile (Scrum)) y su trabajo a tiempo parcial como asistente sanitaria. Los productos digitales, como libros electrónicos, guías financieras y listas de proveedores, constituyen una tercera fuente de ingresos, mientras que los contenidos patrocinados, incluidas las asociaciones y colaboraciones con marcas, constituyen una cuarta.
Otra fuente de ingresos procede de sus inversiones, que incluyen fondos de inversión inmobiliaria (REIT), acciones y fondos indexados. En un momento dado, Okpechi llegó a obtener dividendos de cinco cifras. Las suscripciones, incluidos los de pago de su comunidad de inversores, suponen otra fuente de ingresos.
También gana dinero a través del marketing de afiliación y la creación de contenidos, y actualmente está creando Moneybestie, una aplicación de tecnología financiera basada en inteligencia artificial diseñada para simplificar la educación financiera, especialmente para mujeres y adolescentes.
"Me pago a mí misma primero e invierto de forma consistente, sólo invierto en lo que conozco y entiendo, así que lo mantengo bastante aburrido y simple".
Invertir pronto: por qué no debes esperar
Uno de los consejos clave que Okpechi dio a los jóvenes que empiezan a crear sus carteras es que empiecen poco a poco, pero de forma inteligente, controlando los gastos y manteniendo un presupuesto. También insistió en la importancia de vivir por debajo de las propias posibilidades y resistirse a la presión del grupo, además de adquirir una valiosa habilidad.
"Hay deudas buenas y deudas malas, evita las malas. Invierte pronto y con constancia, aunque sólo sean 25 libras (29,8 euros) al mes. Automatiza tus ahorros e inversiones si es necesario, así el interés compuesto hará crecer tu dinero más rápido. El tiempo en el mercado es mejor que la sincronización del mercado", señala Okpechi.
También destacó la importancia de evitar la inflación del estilo de vida, que se produce cuando los gastos aumentan a la par que los ingresos. "Aprenda sobre el dinero como si su libertad financiera dependiera de ello, ¡porque depende de ello!", afirma.
Según la encuesta Schwab Modern Wealth 2024, la Generación Z está empezando a invertir mucho antes que las generaciones anteriores, a una edad media de 19 años. Esto contrasta con los 'baby boomers', que empezaron a invertir en torno a los 35 años, y los millennials, que suelen empezar a los 25.
Okpechi también recomienda sitios web como Nasdaq, Seeking Alpha y Dividend.com para los jóvenes inversores que empiezan. Como recursos valiosos, sugiere libros como 'El hombre más rico de Babilonia', de George Clason, 'El inversor inteligente', de Benjamin Graham, y 'Padre rico, padre pobre', de Robert Kiyosaki.
Los desafíos en el camino
Okpechi destacó que desaprender conscientemente la visión tradicional africana del dinero fue un reto importante en su viaje. Sobre todo porque muchas culturas africanas dan prioridad a la transmisión de la riqueza y los bienes, como las propiedades, a los herederos varones.
A menudo se espera que las niñas se casen, se muden al hogar del marido y dependan de él para su seguridad económica. En consecuencia, invertir en las hijas suele considerarse un despilfarro de recursos, lo que significa que muchas mujeres de origen africano tienen dificultades para lograr la independencia económica más adelante en la vida.
Otro reto al que se enfrentó Okpechi fue lidiar con el síndrome del impostor como mujer que trabaja en finanzas y tecnología, además de enfrentarse a los estereotipos de género en un sector predominantemente masculino.
Las inversiones y las finanzas siguen siendo campos dominados en gran medida por los hombres, y las mujeres inversoras y expertas a menudo tienen que demostrar continuamente su experiencia y credibilidad, sobre todo cuando se dirigen al público. Hacer malabarismos con múltiples trabajos y hacer frente al agotamiento, junto con resistirse a los gastos sociales y a la presión de grupo, fueron otros obstáculos.
"Aprendí a perdonarme los errores financieros y a seguir adelante de todos modos. Si tuviera que volver a hacerlo, hablaría más abiertamente de dinero. Rompe la vergüenza y ayuda a los demás a crecer también", afirma Okpechi.