Noruega está experimentando un aumento de las llegadas de turistas en busca de climas más frescos. Sin embargo, quiere proteger su ecosistema y evitar el turismo masivo. Esto sabemos de su tasa turística.
Noruega ha actualizado sus planes sobre un impuesto a los visitantes con el que espera atajar los efectos negativos del turismo excesivo. El gobierno ha anunciado que rebaja la tasa que las autoridades locales podrán cobrar a los turistas.
La Ministra de Comercio e Industria, Cecilie Myrseth, ha confirmado que el impuesto será ahora del 3% del coste de una pernoctación, en lugar del 5%. Noruega está experimentando un aumento de las llegadas de turistas en busca de climas más frescos, alcanzando la cifra récord de 16,7 millones de pernoctaciones durante los meses de verano de 2024.
Noruega introduce una tasa turística
La tasa turística Noruega será una tasa opcional que las autoridades locales podrán recaudar a su discreción. Los ingresos se utilizarán para financiar proyectos que beneficien tanto a residentes como a turistas, como el mantenimiento de rutas de senderismo y la instalación de aseos públicos. Si un municipio la implanta, la tasa se aplicará a los visitantes que pernocten en cualquier tipo de alojamiento, incluidos hoteles, albergues, campings y alquileres de corta duración.
Las autoridades locales también podrán ajustar la tasa en función de la temporada, confirmó Myrseth. "No es que tengamos turismo todo el año en todo el país, pero en algunos lugares hay partes del año que son especialmente exigentes, y los gastos que tienen que pagar los residentes son especialmente altos", declaró Myserth a la cadena pública noruega NRK.
¿Cuándo tendrán que pagar los viajeros la tasa turística noruega?
De momento, no hay fecha fija para la introducción de la tasa de estancia, aunque los informes dicen que podría entrar en vigor este mismo verano. El Gobierno aún tiene que aprobar en el Parlamento el proyecto de ley sobre la tasa, pero varios partidos parecen oponerse a ella. La rama de viajes y turismo de la Confederación de Empresas Noruegas (NHO) ha advertido de que podría disuadir a los turistas de visitar el destino.
"Nos encontramos en una situación muy grave. Introducir la tasa turística ahora es, en cualquier caso, una locura", declaró un portavoz de la NHO a NRK a principios de esta semana. El impuesto propuesto también ha sido criticado por dirigirse sólo a los visitantes que pernoctan, dejando fuera del pago a los pasajeros de cruceros, los excursionistas de un día y los campistas que pernoctan en zonas públicas gratuitas. Los detractores sostienen que estos son algunos de los tipos de visitantes más perjudiciales, sobre todo en destinos de cruceros frecuentemente saturados, como las islas Lofoten y el fiordo de Geiranger.
Noruega vive un auge del turismo
El gobierno noruego lleva varios años estudiando la introducción de una tasa turística como reacción al aumento del número de visitantes. Las temperaturas sofocantes en destinos veraniegos tradicionales como Italia y España están impulsando la moda de las "vacaciones frescas" en el norte de Europa.
A ello se suma el creciente interés por los fenómenos nocturnos, como las auroras boreales. Noruega está considerada uno de los mejores lugares para la observación de auroras, y el espectáculo celeste está resultando especialmente visible en 2025.