El BCE bajó su tipo de interés de referencia un cuarto de punto, en línea con las estimaciones de los analistas.
El Banco Central Europeo recortó el jueves su tipo de interés oficial de los depósitos en 25 puntos básicos, hasta el 2%, su nivel más bajo en más de dos años. Los tipos de interés de sus operaciones principales de refinanciación y de la facilidad marginal de crédito también se reducirán hasta el 2,15% y el 2,40%, respectivamente, con efectos a partir del 11 de junio de 2025.
El tipo de interés de las operaciones principales de financiación es el tipo que pagan las entidades de crédito cuando toman prestado dinero del BCE durante una semana, mientras que la facilidad marginal de crédito es el tipo que pagan las entidades de crédito cuando toman prestado dinero del BCE a un día. La facilidad de depósito es el tipo de interés que reciben los bancos cuando depositan dinero en el banco central a un día.
"Aunque se espera que la incertidumbre en torno a las políticas comerciales lastre la inversión empresarial y las exportaciones, especialmente a corto plazo, el aumento de la inversión pública en defensa e infraestructuras respaldará cada vez más el crecimiento a medio plazo", declaró el BCE el jueves.
"El aumento de los ingresos reales y la solidez del mercado de trabajo permitirán a los hogares gastar más. Junto con unas condiciones de financiación más favorables, esto debería hacer a la economía más resistente a las perturbaciones mundiales."
La tasa de inflación anual de la zona euro cae por debajo de las estimaciones
El recorte del jueves, que sitúa el tipo de depósito a la mitad del máximo observado en junio de 2024, se ve respaldado por la relajación de las presiones sobre los precios. La tasa de inflación anual de la zona euro se situó por debajo de las estimaciones en el 1,9% en mayo. Esta cifra es inferior al 2,2% de abril y está por debajo del objetivo del 2% fijado por el BCE.
La inflación subyacente, que excluye los precios volátiles de los alimentos y la energía, también se redujo en mayo, situándose en el 2,4%, frente al 2,7% de abril. El enfriamiento ha sido más rápido de lo previsto por el BCE a principios de año, en parte gracias a un euro más fuerte, que abarata los productos importados, y a unos costes de la energía inferiores a los previstos.
Se espera que estos factores, así como el debilitamiento del mercado laboral, contribuyan a moderar la inflación en los próximos meses. Las mercancías desviadas de EE.UU., redirigidas a causa de los elevados aranceles, podrían acabar también en Europa, presionando a la baja los costes al aumentar la oferta.
Las previsiones de crecimiento para la eurozona son también muy inciertas, ya que los aranceles de la istración estadounidense perturban el comercio mundial y frenan la demanda de los consumidores. La economía de la eurozona creció un 0,3% en los tres primeros meses de este año, frente al 0,2% del trimestre anterior, superando las expectativas.
A pesar de la guerra comercial hay otros factores que suscitan esperanzas
Pese a la perspectiva de una ralentización del comercio mundial, el aumento de las intenciones de gasto en Defensa e inversiones en infraestructuras en Europa ha suscitado esperanzas de aceleración del crecimiento.
Alemania ha aprobado una enmienda constitucional a su norma de "freno de la deuda", lo que significa que el gasto en defensa superior al 1% del PIB no estará sujeto a límites de endeudamiento. El Gobierno también ha creado un fondo extrapresupuestario de 500.000 millones de euros para gastos adicionales en infraestructuras.
Estos acontecimientos hacen prever que la bajada de tipos del jueves será la última decisión fácil del Consejo de Gobierno. Según una nota de ING publicada a principios de esta semana, "el mercado ha descontado un recorte para finales de año, hasta un tipo de la facilidad de depósito del 1,75%".
"Hay posibilidades moderadas de que el BCE recorte más adelante. Sin embargo, la fijación de precios se ve impulsada sobre todo por el sentimiento en torno a las relaciones comerciales entre EE.UU. y la UE, cuyas tensiones han vuelto a aumentar últimamente", añadieron los economistas.