Santa Catalina del Monte Sinaí es el monasterio cristiano en activo más antiguo del mundo. Voces en Grecia critican lo que supondría la clausura del edificio religioso.
Atenas contiene la respiración ante la decisión de un tribunal egipcio, según la cual el Santo Monasterio de Santa Catalina del Sinaí y todas sus propiedades en Egipto quedarán en manos del Estado egipcio.
"Los Gobiernos de Grecia y Egipto han estado trabajando sistemáticamente durante el último periodo para lograr un acuerdo que salvaguarde el carácter sagrado greco-ortodoxo de la región. Estamos a la espera del envío de la decisión del tribunal egipcio que se emitió ayer", declaró la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Lana Zohiou, sobre los acontecimientos.
"El ministro griego de Asuntos Exteriores, George Gerapetritis, se puso inmediatamente en o con el titular de Exteriores egipcio y dejó claro que no hay lugar para desviarse del entendimiento común de ambas partes, expresado por los líderes de los dos países en el marco del reciente Consejo de Alta Cooperación celebrado en Atenas", subrayó.
El arzobispo de Atenas y toda Grecia, monseñor Leronymos, habla de una "anulación" histórica, de la abolición de todo concepto de derecho, de la incautación y confiscación de los bienes del Santo Monasterio de Santa Catalina del Monte Sinaí.
"Intentan borrar la existencia misma del Monasterio"
"Esencialmente, el propio Gobierno egipcio ha decidido, a pesar de los recientes compromisos en sentido contrario contraídos por el presidente egipcio con el primer ministro griego, abolir cualquier concepto de derecho y, en esencia, intentar borrar la existencia misma del Monasterio, negando todo su funcionamiento, su labor devocional y espiritual, así como su labor cultural", afirma el primado de la Iglesia griega.
Según el medio digital 'Ortodoxia Info', la decisión judicial pone fin a la larga disputa legal entre los monjes del monasterio y el Estado egipcio, que comenzó cuando Mohamed Morsi y los Hermanos Musulmanes se hicieron con el liderazgo del país, con el objetivo último de cerrar el monasterio más antiguo del mundo.
La propiedad del monasterio y de todos sus bienes pasa ahora al Estado egipcio. Los monjes deben abandonar ciertas propiedades a las que ya no se les permite el y permanecer en el monasterio para atender sus necesidades religiosas mientras el propietario, el Estado egipcio, se lo permita.
El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, hizo una referencia especial al monasterio del Sinaí en sus declaraciones conjuntas con el presidente egipcio durante la reciente visita de Abdel Fattah Al Sisi a Atenas.