Aunque el naturismo se remonta al siglo XIX en Alemania, hoy en día está cayendo en desgracia entre las generaciones jóvenes.
PUBLICIDAD¿Espera salirse con la suya en su próximo viaje a Alemania? Piénselo otra vez, dicen las autoridades de la ciudad báltica de Rostock. La semana pasada, la ciudad introdujo una nueva normativa que permite a los vigilantes de las playas prohibir el a los visitantes que se nieguen a desnudarse en las zonas nudistas designadas. La medida responde a "numerosas quejas de personas que se sentían acosadas en las zonas naturistas", declaró a la 'CNN' Moritz Naumann, de Turismo de Rostock.
Sin embargo, recalcó que la norma sólo se aplicará "en caso de conflicto". Aunque prohibir la ropa en una playa nudista pueda parecer redundante, la decisión pone de relieve un reto permanente: garantizar que los espacios naturistas sigan siendo cómodos para quienes abrazan este estilo de vida.
El naturismo está muy arraigado en Alemania. La FKK o Freikörperkultur (cultura del cuerpo libre) se remonta a finales del siglo XIX. El movimiento anima a sus adeptos a despojarse de la ropa y participar en actividades saludables para conectar con el mundo natural, promoviendo una filosofía de aceptación del cuerpo y armonía con la naturaleza. Para muchos alemanes, la desnudez social se ha considerado una parte normal de la vida. Playas, parques e incluso rutas de senderismo cuentan desde hace tiempo con zonas nudistas designadas en el país.
¿Cuál es el comportamiento aceptable en una playa nudista?
Hoy, sin embargo, la práctica está desapareciendo entre las generaciones más jóvenes. "El número de personas que lo practican hoy en día es cada vez menor", señala Naumann, quien añade que, como consecuencia, Rostock ha reducido sus playas naturistas oficiales de 37 a 27 zonas.
Cualquiera que sienta curiosidad por el naturismo debe conocer las normas y expectativas específicas. Todos los tipos de cuerpo son bienvenidos y animados, pero mirar fijamente, hacer fotos y comentarios no solicitados están estrictamente prohibidos. Y aunque en algunas playas se permite la desnudez social, esta práctica no se acepta en todas partes. Los turistas que han hecho caso omiso de estos límites han desatado la polémica no sólo en Alemania, sino también en Portugal y destinos tan lejanos comoNamibia.
En Rostock, los 15 kilómetros de costa están cuidadosamente divididos en playas naturistas, de uso mixto y de sólo ropa, para garantizar que todos los visitantes tengan un espacio en el que se sientan cómodos. Pero para los que pisan una playa nudista designada, una regla está clara: desnúdese o prepárese para marcharse.