Al cadáver de la periodista ucraniana Viktoriia Roshchyna, torturada y muerta en cautiverio ruso, le faltaban algunos órganos internos, según una investigación de la red periodística Historias Prohibidas.
La periodista ucraniana Viktoriia Roshchyna fue capturada en el verano de 2023 cerca de la central nuclear de Zaporiyia, en el sur de Ucrania.
En abril de 2024, Rusia itió oficialmente que Roshchyna estaba cautiva. Pocos meses después, en octubre del mismo año, la familia de Roshchyna recibió una carta de las autoridades rusas en la que se les informaba de sumuerte, pero sin dar detalles ni circunstancias sobre la misma.
Fue entonces cuando la red periodística Forbidden Stories inició una investigación sobre su muerte. En febrero, Moscú entregó a Kiev los cadáveres de 757 ucranianos. El cuerpo de Roshchyna estaba entre ellos, pero registrado erróneamente en los documentos rusos como un "varón no identificado" con el número "757" y una marca "SPAS" en ruso (СПАС), acrónimo de insuficiencia cardíaca.
Durante un primer examen, los patólogos determinaron que el cadáver pertenecía a una mujer. Una investigación llevada a cabo por la Fiscalía General de Ucrania ha revelado una coincidencia del 99% del ADN con Roshchyna.
Investigación de la muerte de Viktoriia
El estado del cadáverimpidió establecer la causa de la muerte mediante el examen forense, según declaró el jefe del Departamento de Guerra de la Fiscalía General, Yurii Bielousov. Sin embargo, "las lesiones corporales le fueron infligidas en vida, por lo que existe una alta probabilidad de que estuviera expuesta a tortura", añadió.
Yurii Bielousov declaró que en el cuerpo de Roshchyna se han encontrado numerosos signos de abusos y tratos crueles, en particular abrasiones y hematomas en diversas partes y una costilla rota. Los expertos también observaron posibles indicios de que se habían utilizado descargas eléctricas.
Según la investigación posterior, su cuerpo presentaba señales de haber sido sometido a una autopsia en Rusia antes de ser devuelto a Ucrania. Durante el examen en Ucrania, resultó que faltaban varios órganos, entre ellos el cerebro, los ojos y parte de la tráquea de Roshchyna.
Los investigadores afirman que se encontró un hematoma en el cuello de Roshchyna, junto con una presunta fractura del hueso hioides, un indicador común de estrangulamiento. Sin embargo, el estado general del cuerpo de la periodista ha hecho imposible determinar la causa exacta de la muerte.
La abreviatura rusa "SPAS", encontrada en su cuerpo, significa "fallo total de las arterias del corazón", una denominación que puede haber sido utilizada por las autoridades rusas para fabricar una causa oficial de la muerte.