La formación ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) ocupa el segundo puesto en las encuestas de cara a las elecciones alemanas del 23 de febrero. Sin embargo, todos los demás partidos han descartado coaligarse con ella.
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, recibió este miércoles en Budapest a la colíder del partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), Alice Weidel, y ambos aprovecharon la ocasión para escenificar un frente común en política migratoria.
La invitación de Orbán es un gesto sin precedentes de un líder europeo hacia la ultraderechista AfD, a la que los demás partidos del continente han rehuido o intentado contener. En una rueda de prensa posterior a su debate, ambos, conocidos por su postura de línea dura contra los migrantes y los solicitantes de asilo, dijeron que querían que Europa presentara leyes más restrictivas para controlar la inmigración.
En sus comentarios, Weidel, candidata a canciller por AfD en las próximas elecciones, habló de una "inmigración descontrolada" que causa "delincuencia importada". Weidel se deshizo en elogios hacia Orbán, afirmando que Hungría era el "baluarte" contra la inmigración irregular.
Orbán, por su parte, dijo que todas las políticas de la AfD, que incluyen deportaciones masivas y el cierre de las fronteras terrestres de Alemania, beneficiarían a Hungría. Orbán lleva mucho tiempo adoptando una postura restrictiva con la inmigración y se ha mostrado crítico con las políticas comunes en Europa. En junio, el Tribunal de Justicia Europeo impuso a Hungría una multa de 200 millones de euros por la infracción "extremadamente grave" de la legislación de la UE en materia de asilo.
Las autoridades húngaras fueron acusadas de detener ilegalmente a los solicitantes de asilo en zonas de tránsito, violar su derecho a permanecer en el territorio nacional mientras recurrían sus peticiones rechazadas y expulsarlos. Orbán, por su parte, ha pedido a la UE que redoble sus esfuerzos para practicar detenciones en las fronteras y obligar a las personas a solicitar asilo antes de entrar en la UE.
Weidel apunta a Bruselas
Por otra parte, Weidel pidió una reforma integral de la UE, exigiendo que se reduzcan drásticamente los poderes de Bruselas y que las decisiones se tomen en los parlamentos nacionales. La eurodiputada aseguró que Europa se encuentra "sin líder" frente al presidente estadounidense, Donald Trump, y sus amenazas arancelarias sobre el continente.
"Es importante que Europa tenga a alguien sentado en la mesa de negociaciones. Pero Europa no lo tiene porque es un lugar muy burocrático, así que Estados Unidos no tiene con quién hablar", dijo Weidel en una probable indirecta a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien a principios de esta semana prometió que la UE tomaría represalias ante las amenazas arancelarias de Trump.
Orbán concluyó diciendo que solo Alemania y Francia pueden salvar a Europa de su "crisis", y añadió que "un país pequeño como Hungría no puede hacerlo. Si la UE funciona, Hungría también funcionará", dijo.
Actualmente, la AfD no forma parte del eurogrupo ultraderechista Patriotas por Europa, fundado por Orbán en el Parlamento Europeo. La formación fue expulsada del grupo de extrema derecha Identidad y Democracia (ID), ya disuelto, por los polémicos comentarios de su antiguo líder Maximillian Krah, quien declaró a un periódico italiano que no todos los de las SS nazis eran criminales.
AfD ha saltado a la palestra internacional después de que Weidel estableciera un insólito vínculo con el multimillonario tecnológico de origen sudafricano Elon Musk, quien invitó al líder del partido a un chat online en la red social X y ha expresado en repetidas ocasiones su apoyo al partido.
AfD ocupa el segundo puesto en las encuestas de cara a las elecciones alemanas del 23 de febrero. Sin embargo, todos los demás partidos han descartado coaligarse con ella. Weidel dijo que su predicción probable para las elecciones era una coalición "ilegal" entre la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Friedrich Merz, el Partido Socialdemócrata (SPD) de Olaf Scholz y los Verdes. También añadió que Merz sería incapaz de cumplir las políticas migratorias clave y que "los votantes abandonarían el barco y votarían a la AfD."