Los manifestantes exigen que el Gobierno sea reemplazado por un gabinete técnico interino hasta las elecciones parlamentarias de 2025.
Diputados y partidarios de la oposición en Albania volvieron a bloquear como ocurrió en octubre pasado las principales calles de Tirana este martes. Exigieron que el Gobierno sea reemplazado por otro interino y de gestión, donde expertos y no políticos no tomen decisiones, hasta las elecciones parlamentarias de 2025.
Los manifestantes acusaron al Partido Socialista, del primer ministro Edi Rama, presidente del Partido Socialista, de corrupción, manipulación electoral y judicial. Detuvieron el tráfico en las principales calles de la capital.
"¡Rama, vete!"
Cientos de activistas, algunos de los cuales viajaron desde otras ciudades, se enfrentaron con la policía antidisturbios en un intento de dispersar a la multitud. Otros organizaron sentadas o intentaron hacer retroceder a los agentes. Los manifestantes corearon: "¡Rama, vete!".
Gazment Bardhi, líder del grupo parlamentario del Partido Demócrata, instó a la policía en la Plaza Wilson a cumplir con su deber garantizando una protesta pacífica y redirigiendo el tráfico. Al final, los agentes de policía desplegados alrededor de edificios gubernamentales clave utilizaron cañones de agua y gas lacrimógeno para frenar a la multitud cerca del Ayuntamiento y la Plaza Wilson.
Líderes procesados por corrupción
El conservador Partido Demócrata y su coalición, que encabezó la protesta, también se manifestó contra lo que llamaron "cargos de motivación política" contra sus líderes, Sali Berisha, en arresto domiciliario, y el ex presidente Ilir Meta, en casos de corrupción separados.
La protesta duró tres horas y los líderes de la oposición prometieron continuar con las manifestaciones en todo el país.
Una oposición dividida favorece al partido del Gobierno
Si bien las próximas elecciones parlamentarias de Albania están programadas para la primavera de 2025, las encuestas indican que es probable que los socialistas de Rama mantengan el poder, en parte debido a una oposición dividida. Tanto Estados Unidos como la UE han instado a la oposición a entablar un diálogo, subrayando que la violencia obstaculizaría los esfuerzos de integración de Albania en la UE.
Las conversaciones con Bruselas sobre la alineación con sus estándares legales y democráticos comenzaron en octubre pasado, y Albania aspira a ser miembro para 2030.