La medida responde a la urgencia geopolítica de la ampliación y al desprestigio de la UE en su vecindad meridional.
PUBLICIDADLa presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha separado formalmente la política de la UE sobre los vecinos del norte de África y Oriente Medio de su enfoque hacia los aspirantes a de su flanco oriental, una medida que, según los críticos, corre el riesgo de perpetuar el "doble rasero" de la UE.
Durante dos décadas, el bloque ha coordinado sus asociaciones con los países vecinos desde una rama ejecutiva dirigida por un único comisario europeo. Pero el nuevo equipo presentado por Von der Leyen el martes por la mañana cuenta con una comisaria para la Ampliación responsable de la vecindad oriental, la eslovena Marta Kos, y otra comisaria para el Mediterráneo, responsable de la vecindad meridional, la croata Dubravka Suica.
Von der Leyen ha dicho que la división es necesaria para que el responsable de la ampliación pueda centrarse plenamente en apoyar la integración de los países candidatos en el bloque, considerada un imperativo geopolítico en medio de la agresión rusa en Ucrania.
Funcionarios de la Comisión Europea afirman también que permitirá a la UE retomar las riendas como actor creíble en el Mediterráneo. "Se convirtió en una cartera tan enorme que resultó que no teníamos suficiente influencia sobre el terreno", dijo un alto funcionario de la Comisión, que habló bajo condición de anonimato. "(Han pasado) diez años desde la primavera árabe, y desgraciadamente estamos como antes".
El Mediterráneo vuelve a ser una prioridad
"Al mismo tiempo, hemos dejado de trabajar mucho en el Mediterráneo", añadió el funcionario. "El papel de Suica será revitalizar esas relaciones". El funcionario añadió que la relación de la UE con Turquía, país mediterráneo y candidato a la UE, a pesar de que su candidatura a la adhesión está prácticamente paralizada, abarcará tanto la cartera de Ampliación como la Mediterránea.
Pero los críticos afirman que la medida no encaja con la política exterior de la UE, basada en valores. "Cuando se examinan las cartas de misión de Von der Leyen, los valores de los derechos humanos y la democracia, que son el núcleo de la política exterior de la UE, están ahí para los países candidatos. Pero está claro que los objetivos de cooperación con los países mediterráneos son diferentes", declaró a 'Euronews' Hussein Baoumi, responsable de Política Exterior de Amnistía Internacional.
"En el caso de la vecindad meridional, se trata de controles migratorios, cooperación energética, básicamente garantizar que los países mediterráneos están alineados con los objetivos estratégicos de la UE", añadió Baoumi. "Se consolida la opinión de que los valores de la democracia y los derechos humanos están ahí para unos, pero no para otros".
Suica, aliada de Von der Leyen desde hace tiempo y miembro de su familia política de centro-derecha, se encargará de la tarea de "hacer operativos los aspectos exteriores" de la política migratoria de la UE, entre otras cosas estableciendo "asociaciones globales" con socios de la región, siguiendo el modelo de los recientes acuerdos de gestión de la inmigración a cambio de dinero en efectivo con Túnez, Egipto, Mauritania y el Líbano.
En virtud de estos acuerdos, el bloque inyecta dinero en las economías de los países a cambio de que se comprometan a reprimir las redes de tráfico de inmigrantes y reducir el número de inmigrantes que emprenden el peligroso viaje en barco hacia la costa meridional de la UE.
El acuerdo con Túnez, firmado en julio de 2023, ha contribuido a reducir en un 60% las llegadas irregulares en barco a Italia en los ocho primeros meses de este año en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El modelo está ganando interés entre los Estados de la UE, especialmente en un momento en que la creciente popularidad de los partidos de derechas contrarios a la inmigración está llevando la cuestión migratoria al centro de la política nacional.
Pero los defensores de los derechos humanos han criticado la falta de condicionalidad de la financiación, afirmando que el Ejecutivo de la UE hace la vista gorda ante los abusos documentados de los gobiernos socios contra las comunidades migrantes, como en el caso de Túnez.
Los programas de inversión de la UE en los países candidatos, como los Balcanes, dependen entretanto de que esos países apliquen una serie de reformas vinculadas al fortalecimiento de la democracia y la buena gobernanza.
Suica elaborará una estrategia para Gaza y un plan de reputación para la UE
A la espera de una audiencia y votación parlamentarias, Suica también se encargará de redactar la estrategia de la UE para Oriente Medio con vistas al día después de la guerra de Gaza, en colaboración con la designada jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas.
Varias fuentes conocedoras de las luchas de poder en el seno del Ejecutivo han declarado a 'Euronews' que existe una preocupación de que Von der Leyen pretenda reforzar su propio control sobre la política del bloque hacia Oriente Medio tras la marcha del jefe de la diplomacia, Josep Borrell, y que la designación de Suica, su leal aliada, como comisaria para el Mediterráneo le permita hacerlo.
Se considera que Borrell sobrepasó los límites de su mandato para ejercer presión diplomática sobre Israel a fin de que cumpliera sus obligaciones internacionales en la guerra de Gaza. Von der Leyen, junto con el comisario europeo de Vecindad y Ampliación saliente, el húngaro Olivér Várhelyi, han sido duramente criticados por lo que muchos juzgan como una postura firmemente proisraelí.
Suica heredará ahora el mando de Várhelyi sobre la financiación de la UE a la Autoridad Palestina, que según la carta de misión de Von der Leyen estará "anclada en reformas", ayudando a "allanar el camino para una solución de dos Estados". También se le ha encomendado la tarea de colaborar con la comunidad internacional en un plan de reconstrucción para Gaza.
Entre las peticiones de Von der Leyen figura también un plan estratégico de comunicación destinado a promover el papel de la UE en su vecindad meridional y "contrarrestar las narrativas contrarias a la UE".
Se considera que la reputación de la UE en Oriente Medio y en el Sur Global en general se ha deteriorado aún más desde que estalló la guerra en Gaza con el ataque de Hamás a Israel hace casi un año.
Von der Leyen fue ferozmente criticada por su indecisión a la hora de hablar de la cifra de muertos en Gaza, que actualmente supera los 41.000, según Hamás, y por no tomar medidas de represalia cuando el comisario Várhelyi anunció unilateralmente que se suspenderían inmediatamente "todos los pagos" a los palestinos en respuesta a los ataques de Hamás.
"La Comisión es claramente consciente del aumento del sentimiento antieuropeo en la región y del acercamiento hacia ciertos países considerados competidores geopolíticos de la UE, como China o Rusia", afirmó Baoumi, de Amnistía Internacional.
"Revela una disonancia", añadió. "No se puede tener una comunicación estratégica para convencer de que la UE es amiga mientras la UE siga apoyando a gobiernos que los reprimen o a guardacostas que dejan morir a la gente en el mar".