El papel pintado eléctrico ecológico podría ser la solución a la fuga del calor en los hogares durante el invierno.
¿Podría algún día el papel pintado eléctrico sustituir a la caldera de gas? Una ciudad europea está probando esta innovadora forma de descarbonizar los hogares y reducir la factura energética.
Actualmente se está probando en 12 viviendas de la ciudad escocesa de Glasgow para evaluar su eficacia como fuente de calor limpia. El proyecto es fruto de la colaboración entre la Universidad de Glasgow, la Universidad de Strathclyde, la West of Scotland Housing Association y el Ayuntamiento de Glasgow.
¿Por qué deben descarbonizarse los hogares?
Las viviendas escocesas son de las más antiguas y peor aisladas de Europa. De media, pierden calor tres veces más rápido que sus homólogos europeos. Esto significa que sus sistemas de calefacción tienen que trabajar horas extras para mantenerlos calientes, perdiendo mucha energía en el proceso.
El 84% de los hogares escoceses utilizan calefacción central alimentada por combustibles fósiles, lo que significa que también emiten enormes cantidades de CO2. La calefacción de los edificios es responsable de más del 36% de las emisiones totales de carbono del Reino Unido, algo que Escocia intenta combatir con el Scottish New Build Heat Standard (NBHS).
La iniciativa lanzada en abril, exige que los edificios nuevos utilicen sistemas de calefacción respetuosos con el clima, y el papel pintado eléctrico podría ser una pieza clave del rompecabezas.
"Glasgow tiene unos 70.000 pisos de alquiler, por lo que encontrar nuevas soluciones para calentarlos de forma más eficiente es vital para alcanzar un futuro neto cero", afirma el concejal Ruairi Kelly, del Ayuntamiento de Glasgow.
"Proyectos piloto innovadores como éste son vitales a la hora de estudiar la mejor manera de ayudar a abordar los problemas de los costes energéticos y las emisiones en los hogares de Glasgow".
¿Cómo puede el papel pintado eléctrico calentar los hogares de forma más sostenible?
Los investigadores están estudiando la posibilidad de sustituir la calefacción de gas por papel pintado eléctrico ecológico. Este tipo de papel pintado combina tiras de cobre y grafeno o carbono para crear una superficie fina capaz de conducir la electricidad. Emite infrarrojos invisibles, lo que proporciona una fuente de calor sin gas y también se cree que mejora la calidad del aire en las propiedades, generando menos humedad y moho.
Fijado al techo, el papel pintado se instala fácil y rápidamente. Según la empresa NextGen Heating, puede proporcionar calor en uno o tres minutos, lo que lo hace ideal para viviendas difíciles de calentar.
El proyecto, que ha recibido financiación de Scotland Beyond Net Zero -una coalición de destacados expertos en clima y sostenibilidad de las universidades escocesas-, se está probando en viviendas construidas antes de 1919.
¿Es el papel pintado eléctrico una fuente de calor eficaz?
Para controlar su eficacia, la tecnología utiliza datos basados en inteligencia artificial para recopilar información sobre la eficiencia, incluida la retención del calor y el consumo de energía. Los inquilinos también darán su opinión sobre el nivel de confort que proporciona la fuente de calor. De momento, las señales son buenas.
"Llevamos unos meses probando esta tecnología y hemos recibido excelentes comentarios de nuestros inquilinos", afirma Andrew Kubski, director de Desarrollo y Gestión de Activos de West of Scotland Housing Association.
Se trata sólo de una de las ocho nuevas colaboraciones de investigación destinadas a impulsar la transición de Escocia a la energía neta cero. Los proyectos abordan los retos de la sostenibilidad en todos los ámbitos, desde los edificios y el transporte hasta la energía, las finanzas, la alimentación y los sistemas naturales.
"Estos proyectos son un paso crucial en nuestro camino hacia un futuro más sostenible y equitativo, no sólo en Escocia, sino en todo el mundo", afirma Lisanne Gibson, Vicedirectora de Investigación de la Universidad de Dundee y Presidenta del Comité del Fondo Semilla de Scotland Beyond Net Zero.