La Comisión Europea ha identificado 42 ocupaciones con escasez de mano de obra, sobre todo en la construcción, el transporte y la sanidad.
PUBLICIDADPara seguir siendo competitiva, la Unión Europea (UE) necesita mano de obra cualificada. La Comisión Europea y el Parlamento Europeo han abordado esta cuestión en los últimos días. "Cuatro de cada cinco empresas tienen dificultades para encontrar los trabajadores que necesitan con las cualificaciones adecuadas. Hay más de 40 profesiones con escasez en toda la UE, sobre todo en sectores clave como la construcción, el comercio, el transporte y determinadas profesiones sanitarias", declaró Roxana Minzatu, vicepresidenta de la Comisión Europea responsable de Derechos Sociales, Capacidades y Empleo de Calidad, en el Parlamento Europeo en Estrasburgo.
Esta escasez de mano de obra cualificada se debe a problemas de oferta y demanda y a un desajuste entre las cualificaciones de los trabajadores y las necesidades de los empresarios.
"Puede haber presión por la demanda. Y en el caso de las profesiones relacionadas con las tecnologías de la información y la comunicación, dado su rápido desarrollo, no sabemos realmente cuál será la demanda dentro de cinco o diez años", . Entonces, ¿cómo podemos prepararnos para estos conocimientos específicos? Está claro que los sistemas educativos no están preparados para ello", explica a 'Euronews' Ilias Livanos, experto en competencias y mercado laboral del Centro Europeo para el Desarrollo de la Formación Profesional (Cedefop).
Escasez en 42 profesiones
Es probable que esta escasez se agrave debido a factores demográficos y a las transiciones digital y ecológica. "En primer lugar, la demografía. La UE perderá 1 millón de trabajadores al año hasta 2050", explica a 'Euronews' Peter Bosch, investigador asociado del Instituto Egmont.
"En segundo lugar, hay un cambio rápido en el tipo de competencias que se necesitarán debido a la robotización, a la inteligencia artificial, a lo que está ocurriendo en diferentes sectores", añade el investigador. "La tercera razón es la recuperación económica de Europa, con muchos Estados y la Unión Europea poniendo a disposición grandes cantidades de dinero", añade.
El plan europeo de rearme propuesto por la Comisión Europea, que cuenta con un presupuesto de 800.000 millones de euros, y el enorme plan de inversiones en defensa e infraestructuras presentado por el probable futuro canciller alemán, Friedrich Merz, exigirán contrataciones en muchos sectores, según Peter Bosch.
El sistema educativo, pero también las empresas, tienen un papel que desempeñar. "No hay un único propietario del sistema de cualificaciones", afirma Ilias Livanos. Aunque el sistema educativo formal tiene un papel importante en el desarrollo de las competencias, la formación continua es también "responsabilidad de los individuos y de los empresarios", afirma el experto.
Unión de capacidades
La nueva hoja de ruta de la UE marca el rumbo. El 5 de marzo, el Ejecutivo europeo puso en marcha una nueva iniciativa (la Unión de Capacidades) para impulsar la formación con el fin de potenciar la competitividad europea.
Este planteamiento se basa en cuatro pilares. Recomienda invertir en educación y formación, promover el reciclaje profesional, fomentar la movilidad de estudiantes y trabajadores y hacer la UE más atractiva para los trabajadores extranjeros.
En concreto, la Comisión quiere poner en marcha "garantías de competencias", por ejemplo, para "ayudar a las empresas a contratar o formar a personas que corren el riesgo de perder su empleo", explica Roxana Mînzatu.
Otro proyecto emblemático, 'Choose Europe', pretende atraer a Europa a investigadores de terceros países. El Ejecutivo europeo también quiere apoyar los visados para estudiantes extranjeros, reforzar el pacto de cualificaciones para apoyar la mejora y el reciclaje profesional de los trabajadores y hacer más accesible el programa de intercambio universitario Erasmus+.
La UE no es la única en la carrera, advierte Peter Bosch. "La Unión Europea necesitará gente, pero también China, India y los países árabes. Los países árabes ofrecen salarios enormes a la gente que viene a trabajar a sus países", dice el investigador. "La Unión Europea está despertando, pero tiene que hacerlo muy deprisa".