Cuando la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia está a punto de cumplir tres años, se vislumbra un posible final de la guerra.
La Conferencia de Seguridad de Múnich de esta semana marcará el primer encuentro entre el presidente de Ucrania y la nueva istración estadounidense. Se espera que Volodímir Zelenski se reúna con el vicepresidente estadounidense, J.D. Vance, y el secretario de Estado, Marco Rubio, en lo que podría ser el inicio de las negociaciones para poner fin a la guerra de Rusia en Ucrania. La cuestión es en qué términos y condiciones.
Casi tres años después de la invasión a gran escala de Rusia, las expectativas en Kiev son prudentes. Aunque los ucranianos repiten una y otra vez que nadie quiere la paz más que ellos, después de tantas pérdidas y sacrificios, quieren justicia. "Tiene que ser una paz duradera y no un alto el fuego que traería una nueva guerra dentro de cinco años, cuando los rusos se reagrupen, construyan más tanques y más misiles", dice Evheniia Kravchuk, subjefa del grupo parlamentario del partido Siervo del Pueblo de Zelenski.
Habló con 'Euronews' unas horas después de un nuevo ataque ruso con misiles balísticos contra Ucrania y su capital, Kiev, y añadió que las expectativas de Putin tampoco han cambiado. "Putin ha estado dispuesto a matar ucranianos ayer (y) hoy, y estará dispuesto a matar ucranianos mañana. No vemos ninguna intención por parte rusa de poner fin a esta guerra de agresión y a estas matanzas."
E incluso si las negociaciones acuerdan un alto el fuego, nadie en Ucrania cree ahora que vaya a durar. Al igual que tras la primera invasión de 2014, Rusia se reagrupará y volverá dentro de unos años "con más tanques y más misiles", dice Kravchuk. "No quiero que mis hijos y los hijos de otros ucranianos tengan otra guerra cuando habrá otro dictador en el Kremlin o suficientes tanques y aviones para invadir. Además, la próxima vez Rusia movilizaría también a ucranianos de los territorios ocupados para ir a la guerra contra su propio país", afirma, y recuerda que más de un millón de niños ucranianos permanecen en los territorios ocupados.
"Se les ha militarizado, se les ha convertido en armas. Se está borrando su identidad ucraniana. Les están convirtiendo en rusos y diciéndoles 'tenéis que luchar contra vuestros propios parientes', básicamente".
Posibles concesiones territoriales
Una de las mayores preocupaciones de Ucrania es si Kiev se verá obligada a ceder sus territorios, que Rusia ocupa actualmente. En 2014, Rusia se anexionó ilegalmente Crimea y ocupó algunas partes del este de Ucrania. Ocho años después, Moscú inició la invasión a gran escala y capturó más tierras, arrasando ciudades y asentamientos en el sur y el este de Ucrania. ¿Intentará ahora Washington obligar a Ucrania a ceder totalmente estos territorios?
Andrew Novo, del programa de Defensa y Seguridad Transatlántica de CEPA, afirma que existe una diferencia entre "una concesión de iure y una concesión de facto. Por ejemplo, durante el periodo soviético, la Unión Soviética ocupó los Estados bálticos, y esos Estados bálticos formaban parte de facto de la Unión Soviética. Nunca formaron parte de iure de la Unión Soviética. Y Estados Unidos y muchos otros países nunca los reconocieron como parte de la Unión Soviética", explica Novo.
"Cuando la Unión Soviética se derrumbó, esos países obtuvieron o recuperaron su independencia legal de la Unión Soviética y su independencia de facto de la Unión Soviética". Novo dijo a 'Euronews' que sería muy difícil para Ucrania reclamar físicamente ese territorio en las circunstancias actuales. "Pero si Ucrania puede evitar una solución de iure que ceda territorio a Rusia, en algún momento en el futuro podrá reclamar ese territorio".
En cierto sentido, esto podría actuar como "un dividendo de paz" que ayudaría al país a "reconstruirse y avanzar sabiendo que todavía es posible, como en el caso de los países bálticos, recuperar el territorio físico que fue tomado por la invasión". Sin embargo, Novo ite que, a diferencia de lo que ocurría con la Unión Soviética, la cuestión sobre el régimen ruso es "un tipo de especulación muy diferente en términos de lo estable que es y lo probable que es que mantenga su poder a nivel nacional y su capacidad de proyectar poder a nivel internacional en Ucrania".
"Sería pura especulación decir que al régimen de Putin le quedan cinco o veinte años, o que un nuevo Gobierno en Rusia cambiaría su política". Y por eso las garantías de seguridad son clave en cualquier posible acuerdo.
Ucrania y la historia de las garantías de seguridad
El pasado otoño, el presidente ucraniano escandalizó a sus aliados occidentales al afirmar que o la OTAN o misiles nucleares para Ucrania y que no había una tercera opción. "O Ucrania tiene armas nucleares y esa será nuestra protección o debemos tener algún tipo de alianza. Aparte de la OTAN, hoy no conocemos ninguna alianza efectiva", dijo Zelenski.
Posteriormente, la oficina presidencial y el propio Zelenski tuvieron que reiterar en numerosas ocasiones que Ucrania no tiene planes de volver a las armas nucleares. "Lo que quise decir es que hoy en día no existe ninguna garantía de seguridad más sólida para nosotros aparte de la pertenencia a la OTAN".
Zelenski tuvo que explicar además que estaba ilustrando lo grave que eran las cosas para Kiev refiriéndose al Memorando de Budapest de 1994, por el que Ucrania renunciaba a su arsenal nuclear a cambio de garantías de seguridad de las principales potencias nucleares, incluidos el Reino Unido, Estados Unidos y Rusia. Sin embargo, Rusia faltó a su palabra e invadió a su vecino sólo dos décadas después.
A pesar de esa amarga experiencia, Ucrania intentó negociar con Rusia tras la primera invasión en 2014. Esos intentos dieron lugar a los acuerdos de Minsk 1 y Minsk 2, que Moscú no respetó, seguidos de la invasión a gran escala pocos años después.
No queremos otro Minsk, pero tampoco necesitamos otro Budapest".
Así pues, "no necesitamos otro Minsk, pero tampoco otro memorándum de Budapest", afirma Kravchuk, que añade que por eso las garantías deben venir también de Estados Unidos, no sólo de la UE. Señaló a 'Euronews' que Washington no formó parte de los acuerdos de Minsk. "Eso demuestra que este formato, sólo Europa sin la participación del presidente estadounidense, no funciona realmente". A la pregunta de si Europa podría intervenir lo suficiente para sustituir a Estados Unidos, Novo declaró a 'Euronews': "Obviamente, Europa no podría suplir a Estados Unidos, ni políticamente ni en términos materiales prácticos".
Explicó además que, desde el punto de vista de las negociaciones, sólo reduce el poder de negociación de Ucrania. "Si Ucrania está negociando con Europa detrás, puede obtener ciertas concesiones de Rusia, y puede establecer un cierto tipo de estabilización de la situación. Si Ucrania opera sin Estados Unidos y sólo con Europa, ese punto de partida sería más bajo. Si opera con Estados Unidos y Europa, entonces tiene mayor potencial para una solución mejor desde la perspectiva ucraniana."
Múnich y el inicio de las negociaciones
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que quiere que las negociaciones comiencen lo antes posible, siendo la Conferencia de Seguridad de Múnich el primer paso para poner fin a lo que él llama una "guerra sin sentido que está causando bajas masivas y destrucción". Novo ite que no espera necesariamente un gran avance de las reuniones de finales de semana, pero que se presentarán algunas ideas.
"Espero que la nueva istración, a través de sus representantes en la Conferencia de Seguridad de Múnich, presente al menos algunas ideas sobre cómo iniciar las negociaciones, cómo empezar a avanzar en el proceso de paz en Ucrania", explica Novo. Kravchuk, que también estará en Múnich, afirma que Ucrania se encuentra en una situación diferente este año, ya que Kiev controla ahora parte del territorio ruso en la región fronteriza de Kursk, lo que le da más influencia en cualquier posible negociación.
Pero, según ella, lo más importante para poner fin a la guerra es la unidad de los aliados de Ucrania. "Esto es lo que Rusia teme en realidad. Quieren desunir a los socios".