El secretario de Estado de Estados Unidos mantiene la posición de no pedirle a Israel un cese de los bombardeos.
PUBLICIDADEl secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, llegó este lunes a Turquía con la misión de apaciguar la ira de uno de los aliados más estratégicos y difíciles de Washington y segundo mayor ejército de la OTAN en pleno bombardeo israelí de Gaza.
Blinken y el ministro turco de Asuntos Exteriores, Hakan Fidan, comenzaron su primera reunión en Ankara desde el inicio de la guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, provocada por el ataque de los combatientes de Hamás el 7 de octubre.
La reunión se produce en un momento en que en Turquía se escucha la ira contra Israel y Occidente, expresada en las calles y por el propio presidente Recep Tayyip Erdogan, que optó por viajar el lunes a una remota región del noreste del país, una decisión que parece una bofetada al enviado estadounidense Blinken.
Este domingo, la policía antidisturbios turca utilizó gas lacrimógeno y cañones de agua para dispersar a cientos de manifestantes que se habían reunido frente a una base aérea que alberga a las fuerzas estadounidenses en el sureste de Turquía.
Unas diez mil personas han muerto, la mitad de ellas niños, según el gobierno de Hamás, en los devastadores bombardeos israelíes en la Franja de Gaza desde el inicio de la ofensiva israelí.
La intervención militar comenzó después de que los combatientes de Hamás mataran a más de mil cuatrocientas personas y secuestraran y tomaran como rehenes a más de 240 personas, en el ataque más mortífero sufrido por Israel.
Esta guerra amenaza con tener importantes repercusiones en las relaciones entre Washington y Turquía, que está implicada en varios de los conflictos de Oriente Medio.
Durante el fin de semana, Blinken se reunió con otros líderes, incluido el presidente palestino Mahmoud Abbas, en Cisjordania.
También escuchó peticiones de una pausa humanitaria durante una visita no anunciada a Irak del primer ministro del país, Mohamed Shia al-Sudani.
La llegada de Blinken provocó indignadas protestas de miles de personas en el centro de Bagdad.
Lo esencial se mantiene: Estados Unidos ha rechazado las peticiones palestinas y de otros líderes árabes para presionar a Israel para que establezca un alto el fuego en Gaza.
Más tarde, Al-Sudani comentó las peticiones de una pausa en los bombardeos con el presidente de Irán, Ebrahim Raisi, en Teherán.
Irán ha acusado reiteradamente a Estados Unidos de apoyar lo que califican de "crímenes de guerra israelíes contra los palestinos".