Se trata de los modelos R5 y Alpine 290, que provocan fallos que no afectan a la seguridad de los vehículos, de acuerdo con la compañía sa.
El fabricante de automóviles Renault se ha puesto en o con más de 15.000 s de sus vehículos para pedirles que acudan a sus talleres debido a un fallo en el arranque de los mismos.
Los Renault R5 y Alpine 290 son los modelos afectados, según la cadena de radio pública sa 'Ici Nord'. Los propietarios de los vehículos pueden acudir al taller para una operación de mantenimiento que, según asegura la empresa, es rápida y gratuita.
La operación consiste en "reprogramar la ECU del inversor del motor eléctrico principal" para evitar "una posible incapacidad de arranque, acompañada o no de la visualización de la luz de STOP y del mensaje: fallo del motor eléctrico" en el tablero de instrumentos, según ha explicado Renault en un comunicado de prensa. El fabricante ha destacado que el problema no provocará una campaña de retirada, ya que este no afecta a la seguridad del conductor.
El fallo técnico se produce solo cuatro meses después del lanzamiento del vehículo eléctrico R5 de Renault. El fabricante de automóviles francés había informado la semana pasada de una ganancia récord durante 2024, ya que una serie de nuevos lanzamientos impulsaron sus márgenes de ganancia.