La conservadora CDU de Merz fue el partido más votado en las elecciones federales del domingo, al obtener 208 escaños en el Parlamento alemán, de 630 escaños.
PUBLICIDADEl expresidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, ha expresado su confianza en quien probablemente será el próximo canciller alemán, Friedrich Merz, describiéndolo como un líder "resuelto y decidido", preparado para dar prioridad a las necesidades económicas y de defensa del país.
En una reciente entrevista con 'Euronews', Barroso elogió la comprensión de Merz de los retos actuales de Alemania y su potencial para proporcionar "un liderazgo crítico", no sólo a Alemania sino también al continente europeo. "Creo que va a dejar claro que las prioridades de Alemania son la Economía y la Defensa, lo que para mí es obvio", afirmó.
"Ahí es donde los políticos alemanes deben centrar su atención", declaró Barroso. A continuación, destacó el potencial de Merz para "conducir a Alemania y Europa hacia una mayor unidad", especialmente en un momento en que el liderazgo es más necesario. Merz, líder de la Unión Cristianodemócrata (CDU) alemana, ya ha esbozado tres temas clave que pretende abordar en las próximas negociaciones de coalición: frenar la inmigración, fortalecer la economía y determinar la política exterior y de seguridad de Europa.
Centrándose específicamente en la revitalización económica, Merz ha subrayado la importancia de "salvaguardar la base industrial de Alemania", un sentimiento que espera que resuene en su socio de coalición, los socialdemócratas (SPD), liderados por el actual canciller Olaf Scholz. "Tenemos que preservar los empleos industriales en Alemania", subrayó Merz, reconociendo el importante papel que desempeña el sector en la fortaleza económica del país.
Merz quiere reducir la dependencia europea
En un contexto europeo más amplio, Merz se enfrenta al reto de unir un continente en el que muchos líderes están preocupados por sus asuntos internos. Sin embargo, es mucho lo que está en juego para que Merz salve las distancias y asuma el liderazgo en un momento en que los recientes cambios en la política estadounidense han tensado la alianza transatlántica.
Su liderazgo se considera crucial para llenar un vacío de liderazgo dentro de la Unión Europea, sobre todo cuando las naciones europeas se enfrentan a retos globales. Como parte de su estrategia, Merz ha insistido en la importancia de la unidad europea, sobre todo en asuntos relacionados con el futuro papel de la OTAN y el gasto en Defensa.
La próxima cumbre de la OTAN en La Haya, prevista para finales de junio, se perfila como un momento crítico para que Merz y los líderes europeos se reúnan y tomen decisiones clave sobre las relaciones transatlánticas y los compromisos europeos en materia de Defensa.
"Tendremos una cumbre de la OTAN en La Haya a finales de junio. Para entonces, a más tardar, debe estar claro cómo se desarrollará la relación transatlántica. Y para entonces, a más tardar, también debe estar clara la contribución que Europa está dispuesta a hacer a la Defensa dentro de la OTAN", declaró Merz.
Una de las promesas más notables de Merz es reducir la dependencia europea de Estados Unidos, una ambición que ha cosechado los elogios de Barroso, que calificó la postura de Merz de "excepcional".
A pesar de la postura históricamente pro-americana de Merz, dado que ha trabajado con empresas estadounidenses durante gran parte de su carrera, el conservador ha dejado claro que Europa debe asumir un papel de liderazgo más fuerte, especialmente a la luz de los recientes acontecimientos internacionales.
"Friedrich Merz ha sido un "atlantista", es un pro-americano. De hecho, en su vida profesional también ha trabajado con empresas de Estados Unidos", explicó Barroso. "Así que no tiene ningún prejuicio contra Estados Unidos", continuó Barroso. "Al contrario, teniendo en cuenta los últimos acontecimientos, cree que es importante mostrar liderazgo a nivel europeo, y eso es lo que creo que Europa necesita ahora".
Aunque Merz mantiene la esperanza de que EE.UU. siga considerando la estabilidad europea como parte integrante de sus propios intereses, también advirtió de la noción inaceptable de que EE.UU. llegue a acuerdos con Rusia sin consultar a los aliados europeos. "Es inaceptable que los estadounidenses lleguen a un acuerdo con Rusia pasando por encima de los europeos y de Ucrania", declaró Merz, subrayando su compromiso de garantizar que Europa tenga un sitio en la mesa en los debates geopolíticos críticos.
Mientras Merz se prepara para lo que podría ser un papel fundamental en el liderazgo de Alemania, todas las miradas estarán puestas en su capacidad para superar los retos internos y fomentar al mismo tiempo un frente europeo unido y fuerte en la escena mundial.