José Marí Olano pidió disculpas por su comportamiento "incorrecto" en la reunión del Consejo de Ministros del martes para debatir fondos adicionales para las zonas devastadas por las inundaciones en España el pasado mes de octubre.
PUBLICIDADUn concejal de Valencia fue captado comprando vino por internet durante una reunión para discutir fondos adicionales para las comunidades devastadas por las inundaciones mortales que azotaron España en octubre. Durante una sesión plenaria del Ayuntamiento de Valencia el martes, José Marí Olano fue captado en una transmisión en vivo mientras revisaba botellas de vino en un sitio web de bebidas alcohólicas y las agregaba a su carrito.
Según informa la prensa local en ese momento, la compra de vino de Olano generó tanto diversión como enojo en las redes sociales. Después de que otros legisladores mencionaran el incidente durante la sesión plenaria, Olano, miembro del Partido Popular (PP), de centroderecha, se puso de pie al final de la sesión para disculparse por su comportamiento "incorrecto".
"Pido disculpas públicamente a todos ustedes y a los ciudadanos, a quienes todos representamos", dijo. Los legisladores de la oposición se apresuraron a condenar las acciones de Olano. "Cuando ya no se puede indignar más, aparece un concejal del PP de Valencia comprando vino por internet en medio del debate [sobre las inundaciones]", dijo Borja Sanjuán del gobernante Partido Socialista (PSOE). "También llama la atención que esté siempre con el portátil durante los plenos. Pero no esperaba que estuviera comprando vino", añadió.
Papi Robles, de la coalición de izquierdas Compromís, dijo que la compra de vino por internet de Olano durante el pleno fue "una de las cosas más tristes que he visto en política en mi vida". El Ayuntamiento de Valencia aprobó en la sesión 25 millones de euros adicionales para financiar las tareas de reconstrucción en las zonas más afectadas por las inundaciones de octubre.
Las inundaciones del 29 de octubre mataron al menos a 225 personas en el este de España, dañaron innumerables casas y destrozaron vehículos. En algunas localidades, los fuertes aguaceros que provocaron las inundaciones dejaron caer hasta un año de lluvia en sólo ocho horas. A principios de noviembre, cuando la conmoción de los españoles por los destrozos se convirtió en ira, comenzó un juego de acusaciones políticas, dirigido especialmente a las autoridades regionales que no habían enviado alertas de emergencia a tiempo a los teléfonos móviles el día de las inundaciones.
El líder de Valencia, Carlos Mazón, que también es un político del PP, fue criticado y se enfrentó a protestas que pedían su dimisión después de que los medios locales informaran de que había disfrutado de un almuerzo de tres horas con un periodista el 29 de octubre mientras las aguas de la inundación subían.