Impulsado en gran medida por la guerra de Ucrania, el gasto militar de los Estados de la UE alcanzó un máximo de 279.000 millones de euros en 2023, y se espera que en 2024 llegue a los 326.000 millones.
El gasto militar de los países de la UE ha aumentado considerablemente en los últimos años. Sólo en 2023, los países de la UE invirtieron 279.000 millones de euros, la cantidad más alta jamás registrada por la Agencia Europea de Defensa (creada en 2004), y un aumento del 10% respecto a 2022.
Pero el aumento del gasto en Defensa no es una tendencia nueva. Su trayectoria ascendente comenzó en 2014, cuando Rusia invadió la península de Crimea. El año pasado, los países que más gastaron fueron todos vecinos de Rusia: Polonia invirtió el 3,3% de su PIB en Defensa, seguida de Estonia (3,0%) y Letonia (2,9%).
Urge fabricar más armas en el país según el jefe de la AED
El director general de la Agencia Europea de Defensa, Jiří Šedivý, afirma que gran parte de la inversión se destina a "equipos comerciales de fuera de la UE, lo que pone de manifiesto la necesidad de reforzar la Base Tecnológica e Industrial de Defensa (BTID) de la UE".
"Comprar juntos ahorra dinero, mientras que desarrollar activos juntos nos hace más independientes. Europa va por detrás de Estados Unidos yChina en inversión en investigación y tecnología militar. Para asegurar el futuro de Europa, debemos dar prioridad a la innovación y la unidad", asegura Šedivý.
La inversión militar de la UE alcanzará un nuevo récord en 2024
El gasto en Defensa creció en 22 de los 27 Estados de la UE. En 11 de ellos aumentó al menos un 10%. Más del 80% de las inversiones en Defensa, es decir, 61.000 millones de euros, se destinaron a nuevos elementos, a saber, sistemas de defensa aérea, aviones de combate y carros de combate.
Este año se espera que el gasto de Defensa de la UE alcance los 326.000 millones de euros, lo que equivale al 1,9% del PIB de la UE, justo por debajo de la directriz del 2% fijada por la OTAN para sus .
El 2% "no basta" para mantener la disuasión de la OTAN
Sin embargo, el nuevo secretario general de la OTAN, Mark Rutte, declaró el miércoles que "el 2% no es suficiente" para mantener la disuasión a largo plazo. "Ahora mismo podemos defendernos y nadie debería intentar atacarnos. Pero quiero que esto siga igual dentro de 4 o 5 años", declaró tras la última reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN en Bruselas. En julio, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y sus homólogos de la OTAN aprobaron la mayor reorganización desde la Guerra Fría de cómo respondería la Alianza a un ataque ruso.
Según un nuevo plan de alto secreto, la OTAN pretende tener hasta 300.000 soldados listos para desplazarse a su flanco oriental en un plazo de 30 días. Los planes establecen qué aliados responderían a un ataque en cualquier lugar desde la región del Ártico y el mar Báltico hasta el Atlántico y el este del mar Negro. Pero altos funcionarios de la OTAN iten que los países podrían tener que gastar hasta el 3% del PIB para ejecutar con éxito el plan de seguridad. Rutte también dijo que la OTAN podría establecer objetivos específicos para los países con el fin de colmar las lagunas de equipamiento militar.