La Orquesta Sinfónica de Dresde es conocida por traspasar límites que, esta vez, también desafiaron a sus músicos.
La Orquesta Sinfónica de Dresde, en Alemania, ha presentado un innovador estreno mundial. En lugar de que un individuo de carne y hueso dirigiera la actuación de la orquesta, tres brazos robóticos guiaron a los músicos mientras tocaban una pieza personalizada.
"No queremos sustituir a un director de orquesta. Creo que una persona siempre puede hacerlo mejor, sobre todo en el trabajo de ensayo y con las expresiones faciales. Si, por ejemplo, fuera a tocar Beethoven, no necesitaría un robot así, no tendría sentido", comenta el director artístico de la orquesta, Markus Rindt.
"Pero si tiene una pieza que aprovecha el hecho de que la orquesta toca a diferentes velocidades, en diferentes tiempos, entonces tiene sentido. Eso no existe en ningún otro lugar del mundo", añade.
Un desafío para los músicos
La institución musical de Alemania Oriental celebró su 25 aniversario mirando hacia el futuro. La Orquesta Sinfónica de Dresde es conocida por traspasar límites que, esta vez, también desafiaron a sus músicos.
"Es algo completamente diferente. Tampoco tiene piedad. No espera a nadie. Es una máquina", dice una de los músicos. Los espectadores elogiaron la idea, mientras que otros afirmaron que la pieza sonaba como si viniera de una sola fuente.