Un tribunal de Bruselas rechazó una solicitud de asistencia social presentada por el hombre de 61 años, que recibe una asignación anual de 388.000 euros y alojamiento gratuito.
El príncipe Laurent de Bélgica ha perdido un recurso legal para recibir prestaciones de la Seguridad Social además de su asignación real de seis cifras, en el último revés para el siempre controvertido príncipe, de 61 años. El hermano menor del rey Felipe II había alegado que su trabajo le daba derecho a él y a su familia a recibir prestaciones sociales, además de su asignación real de 388.000 euros y una vivienda gratuita.
Laurent había mantenido que era en parte autónomo debido a su papel como miembro de la realeza y porque había dirigido una organización benéfica para el bienestar de los animales durante la última década. "No se trata de medios económicos, sino de principios", declaró Laurent a la cadena belga 'RTBF'.
"Cuando un inmigrante viene aquí, se registra y tiene derecho a prestaciones de la Seguridad Social", añadió. "Puede que yo también sea un inmigrante, pero uno cuya familia estableció el Estado en su lugar". Sin embargo, un tribunal de Bruselas falló el lunes en contra de su demanda, calificándola de "infundada". El tribunal dijo que Laurent no puede ser clasificado como autónomo ni como asalariado.
No obstante, el juez que preside el caso dijo que el príncipe debería tener derecho a una pensión, pero que las lagunas de la legislación belga lo hacían imposible, informaron los medios locales. El abogado de Laurent, Olivier Rijckaert, declaró al diario belga 'Le Soir' que la petición del príncipe no se había basado en un "capricho" y dijo que estaba estudiando la posibilidad de recurrir.
Un salario neto mensual de 5.000 euros
Según Rijckaert, la mayor parte de la asignación de Laurent se gasta en gastos profesionales, como viajes y el sueldo de un asistente, lo que deja al príncipe con un salario mensual neto de unos 5.000 euros. Esa cifra es comparable al "salario medio de un alto ejecutivo en Bélgica", pero sin la normal "cobertura total de la Seguridad Social", declaró Rijckaert a 'Le Soir'.
Laurent, que tiene tres hijos adultos con su pareja anglo-belga Claire Coombs, ha expresado su temor por la seguridad económica de su familia, ya que la asignación real cesará a su muerte. El príncipe, 15º en la línea de sucesión al trono belga, tiene una larga tradición de polémica y ha sido apodado 'el príncipe maldito' por varias meteduras de pata y escándalos.
En 2018, se le recortó la asignación después de que asistiera a un acto en la Embajadachina con uniforme naval completo sin el consentimiento del Gobierno belga. Laurent tuvo que devolver 16.900 euros en 2014 tras facturar al Estado gastos de alimentación, vacaciones de esquí y matrículas escolares de sus hijos.
En 2011, Laurent se ganó la ira del entonces rey Alberto II cuando visitó el Congo, antigua colonia belga, en contra de los deseos de su padre y del Estado. También fue criticado por asistir a reuniones en Libia cuando Muanmar el Gadafi aún estaba en el poder.