El líder de la delegación del Parlamento Europeo en la COP29 dice a 'Euronews' que los esfuerzos de mitigación deben intensificarse de forma ambiciosa.
PUBLICIDADEl último borrador del texto de negociación, publicado el jueves por la presidencia de la COP29, ha suscitado algunas dudas en Bakú. El nuevo documento pone de relieve varias cuestiones clave que siguen sin resolverse, como qué elementos se incluyen en la cifra anual, quiénes son los contribuyentes y cuánto se espera que aporten. El Comisario de Clima de la UE, Wopke Hoekstra, calificó de "inaceptable" la falta de cifras claras para el objetivo de financiación climática. Aunque no está directamente involucrada en las negociaciones, le preguntamos a Lídia Pereira, presidenta de la delegación del Parlamento Europeo, qué opina al respecto:
"No podemos poner en riesgo la mitigación. Tenemos que trabajar con los tres elementos del cambio climático: mitigación, adaptación y pérdidas y daños. Por eso, para nosotros es inaceptable que haya ciertos países que presionen para que se dé marcha atrás en el acuerdo alcanzado el año pasado en Dubái. El consenso de los EAU sobre la transición hacia el abandono del uso de combustibles fósiles".
La UE está dispuesta a dar un paso adelante
Esperando que las cifras del nuevo acuerdo de financiación climática se propongan pronto, Pereira insistió en que es necesario ser ambicioso en lo que respecta a las políticas y objetivos de mitigación:
"Creo que el lado positivo de estas negociaciones es que la UE está dispuesta a dar un paso adelante en lo que respecta a la financiación climática. Pero, por otro lado, tenemos que ver algún movimiento que no dé marcha atrás en lugar de dar un paso adelante en lo que respecta a la mitigación".
En un comunicado, la presidencia de Azerbaiyán de la COP 29 aclaró que el documento no es definitivo y que las cifras se añadirán en la próxima publicación. Fuentes cercanas a las negociaciones dijeron a 'Euronews' que "aunque este texto no es ideal y requiere más consultas, el mundo está cerca de ver el histórico avance de Bakú".
El reconocimiento y la definición de las contribuciones son campos de batalla clave
El borrador "reconoce el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas y capacidades respectivas a la luz de las diferentes circunstancias nacionales y enfatiza la necesidad de respetar la soberanía de los países", dijeron las fuentes.
La Convención Marco de las Naciones Unidas de 1992 nombró a los países desarrollados responsables de la financiación climática, pero un documento de 32 años de antigüedad apenas representa la realidad actual y estos países "ahora dicen, bueno, hay otros países que podrían contribuir", dijo Eleonora Cogo, del 'think tank' italiano por el clima ECCO, añadiendo que estos países, como Corea del Sur y China, "ya están contribuyendo y desempeñando un papel importante, por ejemplo a través de los bancos multilaterales de desarrollo". Por lo tanto, las preguntas cruciales son cómo se debe reconocer esto y si se les debe permitir mantener el carácter voluntario de sus contribuciones o ser considerados responsables ante la Convención.