Según los dos ex primeros ministros italianos, pesos pesados de la política europea, el fracaso en el nombramiento de los dos vicepresidentes podría provocar la caída de la Comisión.
PUBLICIDAD"Confiamos en que, frente a candidatos cualificados como Teresa Ribera o Raffaele Fitto, no prevalezcan las tensiones internas, en particular entre grupos considerados más europeístas como el Partido Popular y los socialistas". Así lo afirman Romano Prodi y Mario Monti en una nota conjunta publicada el martes sobre el nombramiento de los vicepresidentes de la Comisión Europea. Los dos pesos pesados de la política europea, Prodi fue jefe de la Comisión entre 1999 y 2004 y Monti dos veces comisario entre 1995 y 2004, apelan al "sentido de responsabilidad" de los eurodiputados de la frágil mayoría de Úrsula, llamados en estas horas a encontrar un acuerdo sobre las vicepresidencias.
Palabras que se hacen eco de las más tranquilas pronunciadas la semana pasada por el presidente de la República, Sergio Mattarella, que felicitó a Fitto "por un papel tan importante para Italia", pidiendo orden nacional. Según los ex primeros ministros, las tensiones de las últimas semanas "podrían incluso provocar la caída de la Comisión Von der Leyen 2, tras una gestación de cinco meses e incluso antes de su entrada en funciones, justo cuando los cambios en la política estadounidense nos obligan a construir una "Europa más fuerte y cohesiva".
A la espera de un acuerdo sobre los vetos cruzados de populares y socialistas
El miércoles podría desbloquearse el 'ime' sobre las vicepresidencias ejecutivas. El optimismo se filtra, mientras se espera desde hace una semana la luz verde de las comisiones competentes para los nombramientos, tras las audiencias preliminares del 12 de noviembre.
El juego sigue abierto entre los aliados de la mayoría Úrsula von der Leyen, socialistas (S&D), populares (PPE) y liberales (Renovación), cuyos líderes aún no han llegado a un acuerdo sobre los nombramientos de Raffaele Fitto (Hermanos de Italia) y la española Teresa Ribera (PSOE). También está en juego el nombramiento del húngaro, Olivér Várhelyi como comisario de salud y bienestar animal, que se conoció en una audiencia el 7 de noviembre.
Los diputados socialistas españoles (los segundos más numerosos del Parlamento Europeo) temen que el nombramiento del ministro de Meloni suponga un giro excesivo a la derecha de la Comisión. Por otro lado, el Partido Popular se opone al nombramiento de la socialista Teresa Ribera, vicepresidenta del Gobierno de Sánchez y ministra de Transición Ecológica, criticada por la gestión de las inundaciones en Valencia.
La secretaria del Partido Demócrata, Elly Schlein, ha señalado estos últimos días al Partido Popular, que "está intentando ampliar estructuralmente la mayoría", reiterando que "el problema nunca han sido Fitto y sus representantes". Se trata de las tensiones de la semana pasada, cuando el grupo presidido por ManfredWeber votó las enmiendas de derecha que debilitaban el texto de la ley sobre la deforestación.
Ante las puertas abiertas a nuevas alianzas por parte del PPE europeo, los aliados intentan llegar a un acuerdo sobre un documento común basado en el programa ya presentado por Von der Leyen. El objetivo es mantener el radio de acción del Partido Popular fuera del ala más conservadora y reaccionaria del Parlamento Europeo.
Sánchez se abre a Fitto para desbloquear a Ribera
Los líderes europeos presentes en el G20 en Río de Janeiro también esperan la aprobación del paquete de seis vicepresidentes (además de Fitto y Ribera, Kaja Kallas, Roxana Mînzatu, Stéphane Séjourné y Henna Virkkunen).
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que se reunió con Von der Leyen el martes en la ciudad brasileña, se abrió a la nominación de Fitto, con la esperanza de poner fin al juego de vetos cruzados con el Partido Popular y desbloquear la nominación de Ribera. Signos de relajación, pese a las críticas de ser una "mala candidata" expresadas por el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijoo, en el Congreso de Madrid la mañana del miércoles, cuando Ribera fue llamada a responder por la gestión de los trágicos acontecimientos de Valencia.
Sin embargo, el veto español no debería bloquear al Partido Popular Europeo, al menos según Antonio Tajani. El ministro de Asuntos Exteriores y vice primer ministro (en la cuota del PPE) afirmó en una entrevista a la prensa que "el PP quiere esperar a que la ministra Ribera dé explicaciones en el Parlamento sobre las inundaciones de Valencia. Entiendo su punto de vista, pero no creo que la Comisión pueda ser bloqueada", añadiendo que está "convencido de que los vetos han caído. La Comisión debe empezar el 1 de diciembre y así será".