ANÁLISIS: Cómo hacer más eficaz la gestión de incendios que asolan Grecia

PUBLICIDAD

Las condiciones más favorables para el estallido y la rápida propagación de los incendios las crean las múltiples olas de calor en verano y las precipitaciones mínimas en invierno. Estas condiciones han convertido el Ática (Grecia) en un pozo de fuego, según los científicos, donde una pequeña chispa puede tener consecuencias trágicas.

Pero como ahora estos fenómenos se repetirán todos los veranos, la preparación debe ser sustancial, polifacética y multidisciplinar. Thodoris Giannaros, pirometeorólogo e investigador del Observatorio Nacional de Atenas, explica a 'Euronews' por qué el fuego se propagó tan rápidamente y cómo gestionar los incendios de forma integrada.

"Todos deberíamos estar de acuerdo en que cuando tenemos un incendio forestal que ocupa esta superficie y llega hasta el tejido urbano de una ciudad como Atenas, algo ha ido definitivamente mal. Lo que hay que hacer en tiempo real cuando tenemos un incendio tan grande es lo que llamamos análisis táctico de incendios. Es decir, saber dónde está el fuego, cuándo está ahí con una cartografía precisa del perímetro del incendio, para luego usar datos sobre el tiempo, la vegetación y la topografía para poder predecir por dónde se moverá, cómo se comportará y ahora teniendo este conocimiento poder tener real y efectivamente una estrategia sobre cómo interceptarlo", subraya Thodoris Yannaros.

Los expertos coinciden ahora en que, si no se toman las medidas adecuadas, el riesgo de desertización del Ática, debido al último incendio catastrófico, es más que visible, ya que en los últimos años se ha perdido al menos el 40% del bosque periurbano del Ática, mientras que los indicadores de sequía muestran que la cuenca es semiárida y que los recursos hídricos subterráneos tienden a agotarse.

Puede ver la entrevista completa con Thodoris Yannaros en el vídeo de la parte superior de esta página.