Assunta Scutto y Odette Giuffrida ganaron sus respectivas finales de menos de 48 y menos de 52 kilos. El Grand Slam concluye este jueves.
PUBLICIDADBienvenidos a Abu Dabi, escenario de un nuevo y apasionante Grand Slam de Yudo. La Ciudad Deportiva Zayed acoge durante tres días los mejores combates del mundo en busca de las tan ansiadas medallas. Pasen y vean.
En la categoría de menos de 48 kilos, la número 1 del mundo, Assunta Scutto, volvió a demostrar por qué se merece ese puesto. Un espectacular ippon en la final contra la turca Sila Ersin le daba a la italiana la medalla de oro.
Marius Vizer, presidente de la Federación Internacional de Yudo, fue el encargado de colgársela.
En menos de 60, Francia celebró por todo lo alto la gran victoria en la final de Cedric Revol ante el brasileño Matheus Takaki gracias a un impresionante waza-ari. Se trata del primer oro de Grand Slam para el yudoca francés.
Balazs Furjes, miembro del COI en representación de Hungría, entregó las preseas.
"Es mi primer título, pero ya había ganado dos medallas antes, así que me gusta este lugar, me da buenas vibraciones", confesó después el francés. "Cuatro participaciones, tres medallas, una de oro. Me gusta este lugar, quizá para unas vacaciones la próxima vez".
Dos oros para Italia
Y momento electrizante en menos de 52, donde la siempre imparable Odette Giuffrida se aseguró la medalla de oro con un gran contrataque, ejecutado con maestría. Es su quinta victoria en un Grand Slam. Unos números realmente abrumadores.
Obaid Al Anzi, vicepresidente de la FIJ, hizo los honres en el podio.
"Sí, me gusta estar aquí", reconocía la italiana. "Hace mucho calor fuera, así que para el peso es perfecto. Siempre es mágico para mí, siempre tengo buenos recuerdos y esta es mi tercera medalla, creo, y espero que haya muchas más, así que ya veremos".
La apasionante final de menos de 66 tuvo que resolverse en el punto de oro. Allí, el georgiano Vazha Margvelashvili resolvió las tablas con un waza-ari que le aupaba a lo más alto del podio.
El presidente de la Federación de Yudo de los Emiratos Árabes Unidos, Mohammed Bin Thaaloob Alderei, entregó al campeón su metal dorado.
La final de menos de 57 kilos fue un enfrentamiento épico. Un duelo entre canadienses, Christa Deguchi y Jessica Klimkait, que cayó finalmente del lado de la segunda. Una victoria táctica que daba a la bronce olímpica el preciado oro.
Jabr Al Suwaidi, ministro de Estado de los Emiratos Árabes Unidos, entregó las medallas.
La fantástica actuación del yudoca local Narmandakh Bayanmunkh enorgulleció de manera especial a la grada de Abu Dabi. Bayanmunkh protagonizó una serie de buenos movimientos que le llevaron a hacerse con uno de los bronces de la categoría de menos de 66. La primera medalla emiratí.
El Grand Slam de Abu Dabi concluye este jueves. Aún queda mucho yudo por ver.