Las autoridades han pedido la colaboración ciudadana para esclarecer cómo se produjo el accidente que provocó seis víctimas mortales, y otros siete heridos de diversa consideración. La policía mantiene detenido al conductor, un hombre de 46 años de nacionalidad española, negativo en alcoholemia.
PUBLICIDADDuelo en la localidad de Nieuw-Beijerland, en las cercanías de Róterdam en los Países Bajos, tras la muerte de seis personas en el accidente de un camión español que irrumpió el sábado la zona en la que se celebraba una barbacoa popular.
La consternación entre los vecinos y los testigos del siniestro es total.
"Vivimos en una ciudad cercana, y cuando escuchamos las sirenas buscamos en Internet a ver qué pasaba. Fue una conmoción enorme, fue tremendo lo que sucedió. Terrible para la gente, y también para el conductor que provocó el accidente. Seguro que no fue deliberado", explica Jolanda Koster, vecina de una localidad próxima al lugar de los hechos.
"Es terrible. Todos están muy afectados, comparten el duelo. Aquí nunca pasa nada. Casi no hay ni robos y, de repente, pasa algo así y todo el mundo se pone en alerta. Todos están tan conmocionados que todo el vecindario está afectado", comenta Bob van den Burg, testigo del accidente.
Las autoridades han pedido la colaboración ciudadana para esclarecer cómo se produjo el accidente, que provocó seis víctimas mortales y otros siete heridos de diversa consideración.
Mientras la policía mantiene detenido al conductor del camión, un hombre de 46 años de nacionalidad española, que ha dado negativo en el control de alcoholemia.