El banco alemán hace eectiva la decisión que estára acompañada de la supresión del negocio de renta variable y el recorte de algunas operaciones de renta fija.
PUBLICIDADEs una de las mayores restructuracioenes de un banco de inversión desde el periodo posterior a la crisis financiera. El Deutsche Bank ha comenzado el lunes a recortar 18.000 puestos de trabajo en todo el mundo, entre ellos, equipos completos de gestores de valores en Tokio y otras localidades asiáticas fueron despedidos.
El banco además se deshará de su negocio de renta variable global y recortará algunas operaciones de su renta fija, este último uno de sus puntos fuertes.
Christian Sewing, consejero delegado del Deutsche Bank cree que "también significa que, para promover estas cuatro áreas, tenemos que deshacernos de algunas cosas donde no éramos lo suficientemente rentables. Hemos tomado estas decisiones hoy, y esto se aplica en particular al negocio global de acciones".
El presidente del Comité de Empresa del Deutsche Bank también tilda de positiva la decisión: "Siempre hay que ver que el Deutsche Bank y los puestos de trabajo tienen que estar asegurados para el futuro. Y si doy un paso hoy que duele, que duele desde el punto de vista social, pero que es capaz de ir hacia el futuro, entonces ese es un punto muy importante que nosotros, de nuestro lado, también debemos ver."
Deutsche Bank considera que la reestructuración empujaría al banco a una pérdida este año. Su objetivo es alcanzar el umbral de rentabilidad o obtener beneficios en 2020, pero existe una "incertidumbre significativa en esa previsión". Las acciones de Deutsche Bank aumentaron más del 3% en Frankfurt para alcanzar su valor más alto desde el 2 de mayo.
"Se ha terminado esta eterna duda, pero ahora se están dando pasos difíciles para dar al banco una nueva dirección. En realidad hemos perdido esto en los últimos cinco o seis años", explica Klaus Nieding, de la Asociación Alemana Protectora de la Propiedad de Valores.
El director general Christian Sewing dijo que estaba "haciendo nada menos que reinventar" el Deutsche Bank, que ha estado en números rojos durante cuatro de los últimos cinco años.