Los deportes electrónicos se han convertido en un fenómeno global. Actualmente, representan la forma de entretenimiento más rentable del mundo, con una industria valorada en 121 000 millones de euros en 2020. Los ‘juegos en línea’ ofrece grandes ganancias económicas, y se espera que la industria alcance los 710 millones de euros en Oriente Medio a finales de año. Los premios en metálico son importantes, pero no todo el mundo se dedica a ello por cuestiones económicas.
La jugadora y emisora de contenidos en directo para la plataforma Twitch, Hanna ‘Zahlyn’ Öberg asegura que empezó a jugar, de manera más seria, cuando tenía catorce años. "Mi hermano me introdujo en el mundo de los ‘juegos en línea’ y me atrajo este sector".
Ahora, Hanna emite regularmente su práctica en los juegos en línea. "Si estuviera emitiendo en directo mientras juego, tendría una cámara encendida que me estaría filmando. También echaría un vistazo a un chat de personas que están observando cómo juego, y al mismo tiempo, contemplando mis reacciones".
El debate sobre la consideración de los juegos electrónicos, como deporte, continúa. Pero su credibilidad y dominio en el mundo del entretenimiento es innegable. Millones de aficionados y ‘deportistas’ siguen los principales torneos en plataformas de emisión en directo como, por ejemplo, Twitch y YouTube Gaming.
YaLLa Esports, al igual que muchos de los equipos profesionales de Dubái, se centra en desarrollar el potencial de los aspirantes a jugadores profesionales, analistas y comentaristas. El fundador y director general de YaLLa Esports, Klaus Kajetski, señala que la carrera profesional en los juegos electrónicos, es "extremadamente corta".
"A los 20 años eres demasiado mayor para ser jugador profesional. Pero, entonces, puedes convertirte en entrenador o analista. Así que, nos aseguramos de que exista una trayectoria profesional, incluso después de ese tipo de carrera profesional de corta duración".
El creciente uso de los teléfonos inteligentes, la tecnología de la cadena de bloques y el juego ‘en línea’ también han sido factores clave, que han impulsado el crecimiento del mercado a nivel mundial.
Zone es una plataforma de juegos descentralizada que permite a los jugadores poner a prueba sus habilidades y demostrar su destreza en juegos que ya existen en el mercado y con los que los jugadores están familiarizados.
A Adi K Mishra, fundador y director general de Zone, se le ocurrió la idea en plena pandemia de coronavirus, como una forma de comunicarse y jugar con sus amigos. "El juego podría ser el ajedrez. Podría ser un videojuego de fútbol como es el caso de FIFA, podría ser Valorant... Lo que hacemos es añadir un estrato de la cadena de bloques sobre estos juegos, y permitimos al jugador desafiar a sus amigos de cualquier parte del mundo", señala Adi K Mishra.
Klaus Kajetski, fundador y director general de YaLLa Esports, considera que no todas las personas juegan debido a los premios que se conceden ni por las ‘recompensas económicas’ que reciben los ganadores.
"Yo diría que, para muchos jugadores, tiene que ver más con el trofeo, con el título. Tiene que ver más con el hecho de ser campeones. Aunque, cabe señalar que, hace unos días, nuestro equipo de PUBG para teléfonos móviles ganó un torneo dotado con un premio de ciento cincuenta mil dólares", afirma Klaus Kajetski.
En última instancia, el éxito de los deportes electrónicos se debe a los aficionados y a la comunidad que se crea en torno a los juegos.
Hanna 'Zahlyn' Öberg, jugadora y emisora de contenidos en directo en la plataforma Twitch, considera que los juegos reúnen a mucha gente alrededor de un tema o una actividad que tienen en común. "Eso actúa como una especie de comunidad y crea una conexión", explica Hanna 'Zahlyn' Öberg. Una serie de características que describe como algo "realmente valioso en la vida".
